Hay días que se hacen eternos y otros que pasan en un abrir y cerrar de ojos. La explicación es que algunas veces, sin saberlo, vivimos en Venus, donde los días duran 243 terrestres y otras en Júpiter, donde transcurre el día más corto del Sistema Solar con tan sólo 9,9 horas de duración. Nunca nos lo habían dicho, pero ahora tenemos la clave. La próxima vez que algo te desestabilice, que tu tiempo se pare o se acelere sin tu conSentimiento, piensa que es porque no estás en la Tierra, piensa que es, porque no estás en casa.
Pequeños Planetas
Viajar es maravilloso, pero qué bello es volver a casa
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